En esta edición de su encuentro anual, la CAES propuso debatir sobre la seguridad del paciente. "Pensar sobre esto y proponer mejoras en nuestro sistema de salud en ese sentido, es muy importante para garantizarle a la población buena calidad en la atención de su salud", explicó Norberto Larroca, presidente del Congreso.

La temática de este año estuvo íntimamente ligada con los programas de salud que están priorizando la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS)
"Queremos colaborar con lo que estas instituciones están realizando para mejorar los sistemas de salud de nuestros países", agregó Larroca.

En ese sentido, Juan Larzabal, Presidente de la entidad organizadora indicó que "es importante que analicemos las particularidades latinoamericanas y locales de la seguridad del paciente, para implementar planes destinados a su mejora, y de esta forma, darle un mejor servicio de salud a la población".
En el acto de apertura, el Dr. Larroca sostuvo que es necesario "transitar la lucha por el cambio y colaborar desde nuestro lugar con los responsables de la reforma sanitaria. El eje del sistema de salud debe ser el hombre y para eso es necesario bajar nuestros niveles de confrontación".

También se refirió a la exclusión social como flagelo cotidiano, y enfatizó: "es una vergüenza que en países como el nuestro haya habitantes de todas las edades que puedan morir según la cobertura médica que tengan. No podemos seguir disimulando y esquivando esta situación". En este sentido, convocó a la unidad del sector "que también tiene sus propias miserias". "Aún la salud no es una política de Estado", subrayó el Dr. Larroca y agregó que "los economistas siguen hablando de la salud como un costo. Es hora de asumir nuestras responsabilidades y salir a defender la salud".

Por su parte, el Dr. José María Paganini, director del Centro INUS, planteó el problema de encontrar el camino para mejorar la calidad en la atención de la salud para todos, partiendo de la seguridad del paciente con financiamiento sanitario. "Hay que evitar el reduccionismo sanitario", sostuvo Paganini, quien manifestó que además de "no curar, los médicos podemos hacer mal, y esto tiene que salir a la luz. Para lograr la seguridad del paciente tenemos que trabajar en su educación y en la de los profesionales, en la forma de trabajar y en la capacitación".

Tal como lo explicó el Dr. Paganini, la política de salud es el arte de lograr consensos para definir prioridades y orientar recursos, ejecutar acciones para el bien común. "Todos somos políticos y tenemos un rol que jugar en este sentido. Desde el Estado hay que fomentar las políticas operacionales", subrayó.
Finalmente, el Dr. Gustavo Mammoni, presidente de Confeclisa resaltó que "no se puede hablar de seguridad del paciente sin una clara reforma. La accesibilidad es fundamental. Si el paciente no llega no hay seguridad".

Por otra parte, sostuvo que "no se puede hablar de seguridad con mano de obra barata. Hay que hacer reformas en recursos humanos, capacitación, incentivos y remuneración.
La medicina avanzó en complejidad, pero nos quedamos atrás en muchas otras cosas".
Finalmente, el Dr. Mammoni se refirió a los cambios que está sufriendo la forma del trabajo médico, y explicó que "es importante no perder la confianza de la comunidad en el sistema sanitario. No podemos perder credibilidad. Tenemos que recrear un nuevo estado de bienestar para incluir al marginado. Sin esto, nada tiene sentido".

También planteó la posibilidad de hacer "un fondo anticíclico para la salud y responder así a la demanda de la población en tiempos de crisis con prestaciones de calidad".

Por último, el Dr. Mammoni sostuvo que "el modelo de la acreditación tiene que estar centrado en la seguridad del paciente. La calidad es la ética permanente adecuada la necesidad del paciente".