EDICIÓN OCTUBRE 2014
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XVII Congreso Argentino de Salud
Radiografía de un sector en crisis

Los números revelan que en 30 meses de vigencia de la Ley de Medicina Prepaga se solicitó, en promedio, un alza acumulada de 85,7%, mientras que se autorizó un 67,3 por ciento.

 
Se llevó a cabo en la ciudad de Tucumán el XVII Congreso Argentino de Salud, organizado por la Asociación Civil de Actividades Médicas Integradas (ACAMI), cuyo tema principal fue la política de estado en la salud y donde disertaron especialistas de todo el país.
El Dr. Marcelo Suárez presidente de la CASSEM - Cámara Argentina de Sistemas de Salud de Entidades Médico Gremiales-, asistió al encuentro de profesionales, que arrojó datos duros: en los últimos dos años y medio, se acumuló una brecha de 12% entre incrementos permitidos y efectivamente aplicados- y los aumentos solicitados. Eso representa unos $ 6000 millones menos de ingresos y repercute en la calidad. Los números revelan que en 30 meses de vigencia de la ley de prepagas se pidió, en promedio, un alza acumulada de 85,7%, mientras que se autorizó un 67,3 por ciento.
El acto de apertura estuvo a cargo del presidente de la ACAMI, Hugo Magonza, quien se refirió al encuentro como muy trascendente “porque estamos presentando un proyecto de reforma del sistema salud, algo que venimos trabajando con el sector privado y público, que son quienes nos ayudaron a entender el sistema para proponer en el largo plazo una reforma que sea en beneficio de las 42 millones de personas que habitamos el suelo argentino”. La propuesta del encuentro también incluyó el fortalecimiento del sistema público. “Queremos reforzarlo y complementarlo con la seguridad social del sistema privado, para que todos puedan tener una buena cobertura, que se adapte a las realidades regionales y sea igualitaria”, sostuvo Magonza.
Por su parte, el Secretario ejecutivo médico del SIRPOSA, Fernando Avellaneda, habló de la importancia del Congreso para el sistema de salud. “Estas reuniones son muy significativas porque las políticas públicas de salud están puestas como eje de discusión. Esto enriquece nuestros diálogos y permite trabajar en forma mancomunada para ofrecerle a nuestra población l mejor del sistema sanitario, independientemente de quién sea el financiador o el prestador. Siempre está el paciente como el eje más importante”, aclaró.El periodista especializado en economía, finanzas y negocios, Guillermo Kohan, disertó sobre perspectiva económico-social y dijo que en el mundo hay un problema referido a cómo se paga la salud en el sector privado. “Los trabajadores que aportan una cuota a la obra social forman parte de un esquema que hoy atiende a 20 millones de argentinos y es un sector que mantiene un dilema con el gobierno, que trata de frenar los aumentos de las cuotas”, contó. Por último, se refirió a la salud pública. “Una de las cosas que la Argentina pudo construir a lo largo de muchos años es un sistema de salud, que está para el que puede y para el que no puede pagar, pero que hay que mantenerlo. Es un activo que tenemos y hay que cuidarlo mucho”, dijo. En el encuentro se defendió, entre otras propuestas, la de crear una agencia nacional de tecnología, que establezca cuáles son las prácticas realmente eficaces, para poder evitar tanto la sobreprestación de medicina, como muchas órdenes judiciales que, según los directivos, provocan gastos innecesarios. El congreso de Acami cerró con una disertación del presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, que consideró a la política de la salud entre las que deberían ser consideradas “fuera del debate y la lógica electoral”, y pensada con la mirada en el largo plazo.
 
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