Preocupación por la violencia     En estas mismas páginas nos hemos ocupado permanentemente por un tema recurrente en los últimos años que es el de la violencia en los Hospitales hacia los trabajadores de la salud. Un relevamiento efectuado por una ONG destaca que entre abril del 2018 y abril del 2019 se registraron más de mil episodios violentos hacia médicos y trabajadores de la salud en centros de salud y hospitales de la CABA y el conurbano bonaerense. La violencia en todos sus matices, verbal, física y psicológica, la violencia intrahospitalaria por causa de agresiones externas se ha convertido en una de las razones del desaliento para trabajar especialmente en centros de salud pública del conurbano bonaerense. Los médicos hemos sido formados para intentar curar enfermedades, aliviar dolores y salvar vidas si es posible, pero no para defendernos de agresiones de personas violentas. Sabemos que estamos viviendo en un clima de crispación, intolerancia y violencia de gran parte de la sociedad por múltiples causas económicas y sociales, pero eso no es de ninguna manera una justificación para agredir a un trabajador de la salud o destruir una sala de emergencia. En la Provincia de Buenos Aires, desde el Ministerio de Salud se elaboraron protocolos contra la violencia externa y la violencia interna que están permitiendo un incipiente control de estas situaciones con el apoyo de sindicatos y entidades médicas, entre ellas la Femecon, pero seguimos pensando que además de solucionar las carencias de recursos humanos en los hospitales y mejorar la infraestructura, la solución definitiva pasa por la prevención y disuasión que pueden ejercer personas capacitadas y entrenadas para esas labores como la policía y los cuidadores o vigiladores privados. Trabajemos todos para educar a la población y erradicaremos la violencia.